viernes, 20 de marzo de 2020

LA CIGARRA Y LA HORMIGA

LA CIGARRA Y LA HORMIGA
Edades: de 4 años en adelante



 Un caluroso día de verano, una cigarra cantaba sin parar debajo de un árbol. 

No tenía ganas de trabajar, sólo quería disfrutar de sol y divertirse.

   Un día pasó por allí una hormiga que llevaba cargado en la espalda  un grano de trigo muy grande.
 La cigarra se burló de ella diciendo:
   -¿Adónde vas con tanto peso? ¡Con el calor que hace!
Estarías mejor aquí,  en la sombrita, cantando y jugando.
  No sabes divertirte, dijo mientras se reía.

https://oportunidadenlapoesia.files.wordpress.com/2013/04/ss-02.jpg  - imágenes propiedad de Disney


   La hormiga no le hizo caso y siguió su camino silenciosa y cansada.
 La hormiga pasó todo el verano trabajando y almacenando provisiones para el invierno. 
Cada vez que veía a la cigarra, ésta le cantaba alguna canción burlándose.

 Así pasaron los días de calor y llegó el invierno, un aire frío empezó a correr por el bosque y todos los animalitos empezaban a sentirlo.

  Cuando paso esto,  la hormiga se metió en su hormiguero, un lugar muy calientito, tenía comida suficiente para pasar todo el invierno, y se dedicó a descansar y estar tranquila.

   Sin embargo, la cigarra se encontró sin casa y sin comida. No tenía nada para comer y estaba congelada de frío.
 Entonces, se acordó de la hormiga y fue a llamar a su puerta.
   

https://tuconsentido.com/fabulas/fabula-la-cigarra-y-la-hormiga/

- Hola amiga hormiga,  sé que en tu casa hay provisiones de sobra, vengo a pedirte que me prestes un poco para que pueda vivir este invierno. 
Ya te lo devolveré cuando me sea posible.

   La hormiga escondió las llaves de su hormiguero y respondió enfadada:
   -¿Crees que voy a prestarte lo que me costó ganar trabajando todo el verano?
 ¿Qué has hecho tú? , solo holgazaneaste- dijo seriamente

   - Ya lo sabes - respondió apenada la cigarra - yo cantaba a todo aquél que pasaba.

   - Pues ahora, yo  puedo cantar tu canción donde te burlabas de mi por no poder divertirme ni jugar.

   Y dicho esto, le cerró la puerta a la cigarra.


Y la cigarra tuvo que ir a buscar un refugio para el frío.

   A partir de ese invierno , la cigarra se preocupo por trabajar en el verano para tener que comer y más importante aprendió a no reírse ni burlarse de los demás

Fin


Moraleja

Creo que aunque la cigarra no quiso trabajar, tal vez la hormiga puedo ayudarla en esa situación difícil ya que siempre hay que tratar de ser amables.


Pero recuerden que no debemos burlarnos de los demás nunca y que hay que tratar de hacer primero nuestras tareas y labores antes de ponernos a jugar.

¿Y ustedes son cigarras u hormigas?

lunes, 9 de marzo de 2020

CUENTO EL GANSO DE ORO

El Ganso de oro  


Había una vez un hombre que tenía tres hijos, el menor fue llamado Dummling, y  todos se burlaban de él y lo trataban mal, incluso sus padres quienes tenían preferencia por sus otros hermanos.

Un día el hijo mayor quiso entrar en el bosque para conseguir madera, su madre le preparó un delicioso pastel y una botella de leche  a fin de que no tuviera que sufrir de hambre o de sed.

Cuando el hijo mayor entró en el bosque encontró a un anciano el cual le deseo que tuviera un buen día.
El hermano mayor a penas lo volteo a ver y siguió su camino, pero el viejo volvió a hablarle y le suplico que le compartiera algo de comer ya que llevaba varios días sin probar alimentos.

El joven le contestó enojado que no podía compartirle ya que si lo hacia después el no tendría suficiente comida.


El hijo mayor se alejo y encontró un árbol perfecto para la leña, empezó a cortarlo  pero sin querer dio un golpe falso y el hacha lo hirió en el brazo, de modo que tuvo que regresar  a casa para curarse.  De esta manera pago su desplante al anciano.


Al siguiente día el segundo hijo quiso probar suerte también. 
Cuando llegó al bosque se encontró al mismo anciano pero tampoco quiso compartirle de sus provisiones .
Su castigo, sin embargo, no se retrasó; y en cuanto dio unos pocos golpes en el árbol, se golpeó en la pierna, de modo que tuvo que regresar a casa.

Entonces Dummling dijo,
"Padre, déjeme ir a mí a cortar la madera."-
El padre contestó: 
-Tus hermanos se han hecho daño con ello, olvídalo, tu no podrás-
 Pero Dummling pidió con tanta insistencia que por fin el padre le dijo:
-Ve entonces. Te harás más sabio haciéndote daño."-
Su madre le dio un pastel hecho sólo con agua y harina y horneado en las cenizas, y  una botella de leche ácida. 

Cuando Dummling llegó al bosque, un viejo hombre canoso cruzó en su camino y después de su saludo le dijo:
-Dame por favor un pedazo de tu pastel y algo de beber; tengo mucha hambre y tengo mucha sed."-

El hijo menor contestó:
-"Que pena me da, pero solo tengo un pastel de harina horneado en ceniza y leche ácida; si esto le complace, nos sentaremos y comeremos."-
Entonces se sentaron, y cuando Dummling sacó su pastel de harina, ahora era un pastel dulce muy delicioso, y la leche ácida ahora era la más deliciosa y fresca que había probado nunca.
 Comieron y bebieron, y después el pequeño hombre dijo:

-"Ya que tienes un corazón bueno, te daré suerte. 
Allí se ve un viejo árbol, córtalo, y encontrarás algo en las raíces."- diciendo esto el pequeño hombre se despidió de él.

Dummling fue y cortó el árbol, y cuando cayó había un ganso sentado en las raíces con plumas de oro puro.
 Lo levantó, y lo llevó con él.
 Como ya era de noche se fue a una  posada a dormir. 
El dueño del lugar tenía tres hijas, que vieron al ganso y se maravillaron con las plumas doradas que tenía.
Por la mañana Dummling salió un momento de su habitación y la hija mayor aprovecho para intentar arrancarle una pluma al ganso, lo tomó por el ala, pero su dedo y mano se quedaron fuertemente pegadas en ella.
 La segunda  hija llegó casi de inmediato, pensando  en como podría conseguir una pluma, pero no había más que tocado apenas a su hermana cuando quedó fuertemente pegada. 
La tercera hermana también vino con  la misma intención  y las hermanas gritaron,
-"Quédate lejos; ¡por tu bien, mantente lejos!"-
 Pero ella no entendió por qué debía de alejarse y corrió hacia ellas; pero tan pronto como había tocado a su hermana se quedó pegada también. 

Cuando regreso Dummling tomó al ganso bajo su brazo y salió, sin preocuparse sobre las tres muchachas que colgaban de él. Ellas fueron obligadas a seguir tras él continuamente, ya fuera a la izquierda o  a la derecha,  a donde  él decidiera ir lo seguían.


En medio de los campos el cura los encontró, y cuándo él vio la procesión dijo:
- Qué  vergüenza, muchachas, ¿por qué van por los campos detrás de este hombre? No es correcto-
Al mismo tiempo él agarró a la más joven de la mano a fin de separarla, pero tan pronto como él la tocó, igualmente se pegó rápido, y fue obligado a correr detrás en la fila. 

Al poco rato llegó el sacristán y vio a su maestro, el cura, que corría detrás de tres muchachas. 
Él quedó sorprendido de aquello y dijo:
-Reverendo, ¿hacia adónde van tan rápidamente? ¡no olvide que tenemos un bautizo hoy!"-
 y persiguiéndolo lo tomó por la manga, pero también quedó pegado inmediatamente.
 Mientras los cinco trotaban así uno detrás del otro, dos peones vinieron con sus azadas desde los campos; el cura los llamó y les pidió que los despegaran a él y al sacristán.  Pero ellos apenas habían tocado al sacristán cuando también quedaron rápidamente pegados, y ahora eran siete corriendo detrás de Dummling y el ganso.

Pronto llegaron a una ciudad, donde el rey que gobernaba tenía una hija que era tan seria que nadie podía hacerla reír. 
Para ese entonces él firmó un decreto diciendo que aquél que lograra que su hija riera  podría casarse con ella de inmediato.
Cuando Dummling oyó acerca de eso, fue con su ganso y todo su tren de seguidores ante la hija del Rey, y tan pronto como ella vio a las siete personas correr sin cesar, uno detrás del otro, de aquí para allá, ella comenzó a reír a carcajadas.
En ese momento que la princesa río todos pudieron soltarse de la magia del ganso.


Con eso Dummling pidió tenerla como su esposa, y aprovechando que ahí estaba el cura la boda fue celebrada. 

Después de la muerte del Rey, Dummling heredó el reino y vivió en adelante siempre felizmente con su esposa. 

Y se preguntaran que pasó con el ganso, se cree que regresó con su dueño, el anciano del bosque,  a quien Dummling ayudo aquella vez.


FIN


Moraleja
Hay que ayudar siempre a las personas que nos necesiten y ser bondadosos con lo que tengamos.